33 revoluciones para Rodríguez: poesía al margen de la oferta y la demanda

Fabricio Estrada propone en 33 revoluciones para Rodríguez (primer ganador del Premio Nacional de Los Confines) un guiño a la epopeya, pero con algunas variaciones indispensables para la poesía de esta época. El poemario se compone de catorce poemas, escritos en segunda persona y dirigidos a Sixto Rodríguez. El mismo Sixto que tantos conocieron con el documental de 2012, Searching for sugar man, ganadora en la categoría al mejor documental en los Premios de la Academia.

A diferencia de lo que fuera una epopeya al uso, Estrada le habla a un aparente perdedor, que solamente vio salvada (una palabra difícil de usar porque bien podría no ser cierta) su carrera artística por una coincidencia, pero que por eso mismo se convierte para unos en el verdadero héroe. El lenguaje del poemario tiene un fuerte espíritu narrativo, sin embargo, no abandona su esencia poética en su sentido más canónico: Hemos vaciado la última cerveza con el ánimo / implacable de mantenernos juntos / resucitados / de nuevo agonizantes (pág. 30). Es de esos libros que llevan a la poesía a sus confines, la ponen ontológicamente en crisis y en consecuencia la evolucionan y revolucionan.

Solamente hay un poema en el que Rodríguez no es receptor sino emisor: Rodríguez le escribe a Cindy Lauper, y es justamente donde se encuentran dos de los versos más iluminadores: La última vez que te vi pasaban The Goonies en su / milésimo estreno / quizá el Betamax se atoraba de cuando en cuando / pero yo estaba enamorado, / quería tener asma porque asma tenía el niño / que termina con la niña más bella (pág. 26).

Este deseo expresado en los dos últimos versos es lo mismo que el yo poético deja ver con el transcurrir de los poemas (sí, usé ese verbo como si fueran tiempo… o bien agua). Hay una profunda admiración por ese underground, por ese débil que después de todo se queda con lo que todos desean, porque como propone la doctora Cindy Dell Clark: el estereotipo de asma puede ser definido de cuatro formas: el personaje con asma es un cobarde, el estrés causa ataques de asma, si un niño realmente quiere puede superar la enfermedad y, se puede atacar a los malos con el inhalador (2012). Por cierto The Goonies es una de las 66 películas analizadas en el estudio.

La segunda persona se expresa en términos de formas de tratamiento con el coloquial vos, esto  hace que 33 revoluciones… parezca más un salmo para Sixto que poesía sobre Rodríguez, y creo que esa es la dirección correcta. Se abandona así esa extraña costumbre de dedicar poemas escritos en tercera persona. Y a la vez quizá todos somos Rodríguez, que por fortuna es un apellido que cualquiera podría tener en América Latina. Así que en cada poema se atacan varios frentes.

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Por supuesto que se abunda en referencias a la carrera, la vida, la música y la cultura que se formó alrededor de Rodríguez, cuya extraña carrera era ya poesía, y por eso los versos parecen sólo nacer de la voz de un escritor hondureño. En el poemario no se teme del lenguaje poético ni se lo calcula como sí se haría en un taller para principiantes, lo que evidencia una gran fe en la apuesta estética, que no obedece a la ley de una oferta y la demanda, así como Sixto.

Josué R. Álvarez

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